Optimizando la cooperación global
Jordan comenzó su disertación hablando de la dimensión actual de la OCLC
y de los cambios que se han producido en esta organización, que ha
pasado de ser un conjunto de catálogos de bibliotecas, casi
exclusivamente americanas, a convertirse en el embrión del catálogo
colectivo mundial.
El presidente de OCLC, señaló lo lejanas que están las tecnologías que
los bibliotecarios consideran más avanzadas, de la conducta de
estudiantes e investigadores, que utilizan, preferentemente, Google (un
ochenta por ciento de las búsquedas, con un índice de satisfacción del
noventa por ciento) y que diseñan apps (pequeñas aplicaciones para
móviles).
Según Jordan, la OCLC está potenciando el uso de libros electrónicos,
gestiona acuerdos con Hatchi Trust, y cuenta con un servicio de
impresión bajo demanda, con máquinas que imprimen y encuadernan una obra
de trescientas páginas en apenas siete minutos. Muchas bibliotecas del
mundo tienen acuerdos con diversas plataformas, aportan contenido y lo
venden.