Abren cinco bibliotecas personales de grandes literatos mexicanos
Contaba en una entrevista Carlos Monsiváis que cuando joven, visitar la biblioteca de Alfonso Reyes, a quien se iba a ver en una especie peregrinación, era como encontrar “la Tenochtitlan del conocimiento”. Sin menoscabo de la recientemente reabierta Capilla Alfonsina, se puede tomar prestada la frase del cronista mexicano fallecido en 2010 para ilustrar la novedosa sensación que se experimenta al ingresar a La Ciudadela, histórico inmueble de esta capital al que le han nacido cinco nuevas bibliotecas, una de ellas la del propio Monsiváis.
Ubicado en el centro de la ciudad de México, el edificio de La Ciudadela, construido en el siglo XVIII como fábrica de tabaco -pero que también ha sido cárcel y escenario de asesinatos- se convierte en 1944 en la sede de la Biblioteca de México José Vasconcelos. Ahora a este histórico sitio ha llegado nueva vida: a partir de este viernes está abierta al público la biblioteca Carlos Monsiváis, el quinto acervo de un proyecto de adquisición de bibliotecas de grandes personajes de la literatura mexicana.